Realizar la gestión de auditoría de cuentas es una actividad de interés público en las empresas o instituciones. Esta actividad colabora en el correcto funcionamiento de los procesos administrativos y es muy importante a la hora de garantizar la integridad y eficacia de los estados financieros.
Tradicionalmente los accionistas e inversores eran los destinatarios de este informe, sin embargo, esto ha ido cambiando en el tiempo y el contenido de este documento se ha convertido en una rendición de cuentas pública en muchas empresas, ya que involucra a terceros en el manejo de las finanzas y los recursos.
La auditoría puede ser voluntaria o de carácter obligatorio, pero siempre trae beneficios no solo para los interesados, sino para la propia empresa y su toma de decisiones.
La información que ofrece el auditor brindará seguridad sobre la situación financiera de la empresa y también una perspectiva real de los procesos y movimientos, traducidos en el flujo de dinero anual.
Algunos beneficios de este proceso administrativo pueden ser:
En algunas instituciones la auditoría de cuentas es de carácter obligatorio. Sin embargo, este es un proceso que puede ser solicitado de forma voluntaria si se considera oportuno y útil para el beneficio de la empresa.