Los sueños dorados

Son muchas las personas que sueñan con dejar una huella imborrable en la vida y los atletas que están participando en los Juegos Olímpicos de Río 2016 tienen la posibilidad de lograrlo. Después de un épico triunfo o de, simplemente, cautivar al mundo por un esfuerzo que va más allá de lo deportivo, cientos de atletas han ganado un puesto en la posteridad, pero la historia de Marieke Vervoort es algo que va muchísimo más allá y que, sin lugar a dudas, puede superar cualquier límite.

La atleta de Bélgica competirá en los Paralímpicos, que se desarrollarán desde el 27 de agosto también en Río de Janeiro, en las pruebas de velocidad. Como muchos otros deportistas asegura que toda su vida se ha preparado para la cita deportiva por excelencia, aunque sus razones son diferentes a las de cualquiera.

Marieke Vervoort, de 37 años, padece una enfermedad que le paraliza la parte baja de su cuerpo, que deteriora su estado físico y la somete a un dolor que, muchas veces, puede ser insoportable. No obstante, su compleja condición no le ha impedido luchar por su sueño de medalla, incluso, cuando tiene planes insospechados después de que concluya su presentación. La belga considera la opción de la eutanasia, después de la cita olímpica. En su país, este procedimiento es legal desde el año 2002 para los pacientes que sufren enfermedades físicas o psíquicas incurables.

En 2008, la atleta tuvo que dejar de lado su pasión por el triatlón adaptado, disciplina de la que fue doblemente campeona del mundo, ya que quedó en silla de ruedas. En ese momento entendió que para seguir unida a su pasión debía hacerlo practicando las carreras en sillas de ruedas.

Para Vervoort, el deporte es su única razón para vivir y los Juegos de Río serán su última competición. Anteriormente, ganó un oro y dos medallas de plata en los Juegos Paralímpicos de Londres, en 2012. En 2015, se convirtió en la campeona del mundo en Doha, Catar.

Literalmente, el sueño olímpico mantiene viva a Marieke. La deportista acaparó los titulares de la prensa de su país y la historia le está dando la vuelta al mundo. Y claro, reabrió la polémica de la «muerte digna». Las legislaciones en Bélgica avalan la práctica bajo circunstancias especiales.

Seguramente todos apuntará en la dirección que se mueva Marieke Vervoort que, además de ser una de las favoritas para llevarse una medalla en su deporte, tendrá una trascendental decisión por tomar después de que cumpla su sueño Olímpico.

Pase lo que pase, la historia de Marieke Vervoort pasará a la posteridad como otra leyenda Olímpica. Quizá, eso sea más grande que una simple medalla.

Con base en la información de: Semana